La doctrina siembra y la jurisprudencia cosecha. Ese es el simple reparto de roles (aunque no faltan semillas doctrinales que no fructifican, ni frutos espontáneos jurisprudenciales sin siembra). Como los campesinos de los cuadros de Van Gog ahí estamos los administrativistas mirando el paisaje de revistas jurídicas gratuitas. Hay tanto y tan bueno, que es difícil estar al día. Como decía Schopenhauer bueno sería que «con los libros se vendiese el tiempo necesario para leerlos».
Mi gran problema con el derecho administrativo es que me resulta un universo inabarcable, misterioso y en expansión, que me impone deberes de difícil cumplimiento: profundizar en las vertientes de mi trabajo jurisdiccional (que para eso me pagan); releer mis clásicos de derecho público (siempre inspiran y hay que ser agradecido con los maestros); asomarme a la vanguardia de los derechos sectoriales emergentes (cada vez más emancipados del derecho administrativo matriz); ponerme al día en el derecho digital (está ahí aunque no estemos cómodo con él); repasar la jurisprudencia más reciente y relevante; explorar los puntos de avanzadilla doctrinal; mirar de reojo el derecho comparado y de paso, levantar la vista de la pantalla/libro para tener el radar de las noticias en alerta y poder captar la inquietud de autoridades, empleados públicos o ciudadanos. Casi nada. Necesito días de 120 horas. Sísifo, Atlas y Prometeo, todo en uno. Misión imposible.
No es extraño que muchas veces me dan ganas de arrojar la toalla y dedicarme a la astrofísica o la papiroflexia, o a «ver pasar el tiempo» como la Puerta de Alcalá.
Pero no. El derecho administrativo es adictivo, o es tarde para dar marcha atrás.
Para ayudar a quienes están en mi misma situación de perplejidad, me atrevo a recomendar algunos sabrosos artículos cuyo enlace inmediatamente facilito, para salir al paso de la maldición del derecho administrativo: ¿actualizarse o fosilizarse?
Veamos.
I. Revista de Administración Pública. Núm.225. Septiembre/diciembre 2024. Buenísimos artículos, pero me encantó el de «El interés general: alfa y omega de la justicia administrativa», de Luis Díaz Picazo. Y como no, el luminoso «La impugnación indirecta de actos consentidos», de Manuel Rebollo Puig.
II. Revista de Derecho Público. Teoría y Método. 10, 2024. Maravillosos artículos, de los que recomiendo «Inadmisión y desestimación de plano: la importancia de los conceptos», de José María Baño León.
III. Revista de Estudios de la Administración Local y Autonómica. Núm.22. Octubre 2024. Varios jugosos artículos, y especialmente atractivo me resultó «Los criterios sujetos a juicio de valor. El caballo de Troya de la contratación pública», de Antonio Segura Martínez.
IV. Revista Gabilex. Núm. 40. Cuarto Trimestre 2024. Buenos artículos, pero especialmente clarividentes me resultó las «Reflexiones jurídicas sobre la necesidad de una Ley de Responsabilidad Sanitaria en España, Propuesta de Lege Ferenda», de Marta María Sánchez García.
V. Documentación Administrativa. Núm.13. Diciembre 2024. Varios sugerentes artículos, pero especialmente atractivo me resultó «El nuevo régimen de habilidades del empleado público. Desde los deberes éticos a los factores críticos para la eficacia», de José María Cabrera-Domínguez. Además dicha revista incluye mi trabajo realizado conjuntamente con Juan José Rastrollo, de «Síntesis de la jurisprudencia casacional más significativa sobre empleo público del segundo semestre de 2024».
VI.Revista Vasca de Administración Pública. Núm.130. Sep-Dic. 2024. De entre los estupendos artículos, especialmente interesante me resultó el debido a María Jesús Gallardo Castillo, «La correcta identificación del daño sanitario como premisa para obtener su reparación: viejos paradigmas, nuevas soluciones«.
NOTA FINAL.- Y si alguien quiere leer algo más ligero sobre el mundo de la abogacía, aquí está una treintena de artículos sobre las facetas del know-how forense. Y si es algo valioso y único, puse a disposición las Claves para forjarse gratuitamente en derecho administrativo.